Reconozco

Señor todo lo que no es mío te lo regreso.

Mi mente, mi alma, mi cuerpo todo.

Señor he reconocido que todo lo que tengo es tuyo Señor.

Mi tiempo, mi diezmo, mi esposo, mis hijos, mis hermanos, todos son tuyos mi Dios.

Ayúdame a reconocer cada día que todo lo que no es mío te lo regrese.

El tiempo que me prestas, que lo pueda usar para amarte y glorificarte.

Todo es tuyo Señor, mi dinero, mi casa, mi ropa son cosas que tu me has prestado

para tener por un tiempo conmigo.

Ayúdame para que mientras los tenga cerca de mi, los cuide para ti porque

son cosas prestadas.

Ayúdame que todo lo prestado te lo regrese a ti.

Hasta el amor que tu me das no es mío Señor, si no de ti.

Ayúdame a reconocer que todo es tuyo.

Ayúdame a tener esa convicción día a día para ser feliz y llegar libre aquel día del

juicio, sin ningún temor.

Ayúdame para que todo lo que haga, lo haga por amor a ti mi Dios.

Amen

-MVC-